Integraban la lista de candidatos, pero por una serie de problemas, el favoritismo se fue apagando de a poco. Australia, que ganó brillantemente el Tres Naciones a finales de agosto, se ha visto azotado por una ola de lesiones. Hasta el punto que tuvieron que alinear a un octavo como Radike Samo en la posición de wing, frente a Rusia.

La derrota frente a Irlanda (15-6), les llevará a medirse el domingo contra Sudáfrica, un duelo que podría precipitar los regresos de los también lastimados de Pat McCabe y Rob Horne. La buena noticia en los Wallabies será que podrá volver a jugar el wing Digby Ioane (foto), esencial en tareas defensivas, y que contará también con el centro Kurtley Beale, otro que se mostró curado de su lesión. Drew Mitchell abandonó llorando Nueva Zelanda para recuperarse del desgarro que lo dejó fuera del certamen.